10 trabajos donde es muy probable que los empleados odien a sus jefes.
Desde tiempos ancestrales, el trabajo se ha considerado una condición deplorable, una suerte de condena presente lo mismo en la influyente tradición judeocristiana (“te ganarás el pan con el sudor de tu frente”), como en otras en las que se habla de una edad dorada cuya característica principal es, justamente, que la satisfacción de necesidades se cumple con el esfuerzo mínimo: inclinándose a beber en un río de leche, tomando los frutos de árboles imperecederos, etc.
Y si bien, entre trabajar y no trabajar (al menos en el sentido capitalista de la actividad: el de trabajar para producir riqueza, para convertir el entorno en plusvalía), probablemente sea preferible lo segundo, lo cierto es que en la situación actual, la misma desde hace dos o 3 siglos, es posible clasificar los muchos trabajos existentes en buenos y malos, algunos menos pesarosos que otros, más satisfactorias, tormentosos en ocasiones, sea por las condiciones del trabajo mismo —la explotación desmedida, la falta de medidas de seguridad, el salario injusto—, como por un factor sumamente específico y al mismo tiempo muy frecuente: el jefe que, en la jerarquía, ordena y controla a los subalternos, sobre quienes ejercer el ilusorio poder que tiene de maneras que, inevitablemente, terminan generando odio contra su persona.
De acuerdo con el sitio especializado en contenido laboral Payscale, que elaboró un estudio entre 24 mil personas en Estados Unidos, estos son los 10 empleos en donde es más probable que los trabajadores odien a su jefe.