12 mitos del cine que tienes que revisar si quieres sobrevivir

En esta web he encontrado una serie de mitos que el cine ha instaurado  en nuestras mentes  y que debemos descartar si queremos sobrevivir a diferentes escenarios.

Mito 1. Los silenciadores de pistola apenas hacer ruido. Esto no es cierto, sean de pistola o rifle hacen un ruido considerable. Incluso si pones una botella de plástico o un calcetín en la boca del cañón  el ruido es importante. El verdadero objetivo de un silenciador es distorsionar el ruido del disparo para no ser localizado.

Mito 2. Las armas no se recargan nunca.  Una ametralladora tiene un cargador de 30 proyectiles, pero su cadencia de disparo es de 700 proyectiles por minuto. En circunstancias normales una ametralladora se queda sin munición en unos 4 segundos. En esta categoría de mito entran las pistolas y revólveres que disparan el doble de balas que las que poseen en realidad.

Mito 3. Los chalecos antibalas paran cualquier cosa. La mayoría de chalecos antibalas militares son de anti fragmentación (para metralla o balas rebotadas) Un chaleco antibalas no detiene munición de guerra. Un chaleco antibalas detiene eficazmente balas de plomo, pero no de punta de acero. Un chaleco antibalas puede perforarse con una flecha o un cuchillo.

Mito 4. Las armas no hacen un chasquido espectacular cuando son amartilladas. Cuando un arma se monta y se prepara para disparar (amartillar) no hace practicante ruido. Tampoco cuando una escopeta corredera o semiautomática es recargada. Los casquillos expulsados tampoco son un escándalo. Todo esto son efectos de sonido que se incorporan a los tiroteos en las películas de acción para darle más vistosidad.

Mito 5. Las balas no incendian coches y los hacen explotar. La velocidad del proyectil es tan rápida que lo único que hacen es un agujero en la chapa. No explotan. Por supuesto los coches cuando se estrellan o tienen un accidente no se incendian.

Mito 6. Protegerse detrás de un vehículo, una pared o un sofá en un tiroteo. Si a usted le disparan con armas de guerra no se refugie detrás de vehículo, pared de ladrillo hueco o yeso (pladur). La munición de los rifles de asalto atraviesan limpiamente estos obstáculos. Solo el bloque del motor o una pared de ladrillo macizo, piedra u hormigón le pueden proteger.

Mito 7. Dejar inconsciente a una persona mucho rato con un golpe en la cabeza. Cuando se golpea a alguien en la cabeza apenas estará unos segundos inconsciente. Luego se levantara y continuara luchando. Si una persona está varios minutos inconsciente tendrá una grave conmoción cerebral.

Mito 8. Volar o salir despedido en una explosión. Muchos héroes sobreviven a impresionantes explosiones de vehículos, gasolineras y depósitos de gas o municiones. La realidad seria que sus intestinos, pulmones y tímpanos quedarían destrozados por la onda de choque. Y miles de objetos de metralla impactarían en su cuerpo.

Mito 9. Caer desde una gran altura y no hacerse ni un rasguño. Lo máximo que una persona adulta podría soportar sin hacerse daños considerables es desde 3 pisos de altura. Esto requiere además un suelo “blando” y caer de forma correcta. A partir de 10 metros de altura la velocidad de caída de una persona es de 85 km/hora. Incluso un impacto en agua puede matarlo si cae incorrectamente o causarle graves heridas.

Mito 10. Gas narcótico o dardo envenado. En la realidad  calcular la cantidad de sedante o narcótico para tumbar una persona es complicado. Fácilmente se pasa de una cantidad que tardar segundos o minutos en hacer efecto o matar de forma fulminante (de ahí a el peligro que supone las intervenciones con anestesista y porque esta carrera medica es tan delicada)

Mito 11 perder una extremidad. En las películas algunos protagonistas sobreviven a la perdida por corte, disparo, accidente  o mordedura de una mano, un brazo o una pierna. Si usted está solo apena dispondrá (en el mejor de los casos) de un minuto para hacer un torniquete eficaz o un vendaje compresivo antes de caer inconsciente por la pérdida de sangre y morir desangrado.

Mito 12. Estar de pie sin protección junto a lava o hierro fundido.  El hierro fundido en grandes cantidades o la lava proyectan calor por convección de cientos de grados centígrados. Sin un eficaz traje térmico usted se quemaría irremisiblemente incluso estando a varios metros de distancia.